Aquí, en España, ha subido el IVA, un impuesto. Ya me parecía todo caro, y ahora aún más.
Natto, producto japonés típico de soja fermentada, caracterizado por su peculiar aroma (o hedor), seguramente también habrá subido de precio.
Pero no he ido a comprar paquetes de natto ni tengo intención de hacerlo porque mi plan es fabricar natto casero a partir de un paquete que desde hace tiempo tenía guardado en el congelador para un día como éste.
El procedimiento es sencillo:
- Cocer la soja.
- Mezclar la soja recién hecha caliente con el paquete de natto en un recipiente limpio (preferiblemente desinfectado con agua hirviendo).
- Y esperar, manteniendo el recipiente en un lugar con más o menos 40 grados de temperatura.
Es sencillo, pero el último punto parecía un poco complicado, ya que no tenemos ninguna máquina que regule la temperatura como una yogurtera o cosas parecidas.
Y lo que hemos utilizado para llevar a cabo nuestro plan ha sido un microondas común y corriente.
Desde que compramos la vaporera de bambú no hemos vuelto a utilizar el microondas porque todo se hace mejor con la vaporera. Por eso, actualmente nuestro microondas solo está ocupando un espacio en casa, sin cumplir su función.
Pero ahora le damos un nuevo uso como pequeña caja para la producción de natto (sin ponerlo en marcha, claro). Quién habría dicho que serviría para eso…
Pusimos una bolsa de agua caliente y encima el recipiente de natto sin tapar totalmente, y esperamos.
Después de una noche, con ilusión abrí la puerta…
Parece que todavía no. Pero los granos se han hecho un poco blancos.
Cambiamos otra vez el agua de la bolsa y a esperar…
¡Finalmente, después de unas 30 horas, el resultado ha sido positivo! Los granos arrastran hilos como señal de fermentación.
Guardo tres paquetes en el congelador porque de esta manera puedo «clonar» más natto cuando nos apetezca.
Por cierto, toda esta operación se llevó a cabo mientras mi pareja estaba de viaje porque preveía que iba a oler mal (a él no le gusta demasiado el olor de natto) Y efectivamente, ese día toda la casa olía a natto…